Parecidos a Jesús
Por: David Gómez
CATALIZADOR: Dispositivo que forma parte del sistema de escape del vehículo y su principal función es la de reducir la contaminación producida al expulsar los gases de escape al exterior. De esta manera se disminuye la repercusión ambiental de las emisiones contaminantes producidas por los vehículos a motor.
Permanentemente ocurren hechos y pasan personas alrededor nuestro. De ellos somos destinatarios o receptores de amores, odios, alegrías, dolores, satisfacciones o desilusiones. Cada uno de nosotros -queriéndolo o no- vemos pasar a nuestro lado (y muchas veces aún recibimos en nuestro interior) todo tipo de actitudes y “climas” que nos rodean, sean sociales, espirituales o políticos por mencionar algunos.
Por otro lado, muchas veces nos hemos desafiado a cambiar el mundo que nos rodea y supusimos que eso significaba cambiar a las personas: su forma de creer, de vivir, de pensar, de actuar, de sentir, etc. No sé si te ha pasado, pero en lo personal, esa tarea me ha frustrado mucho al comprobar que no puedo por mí mismo cambiar a NADIE.
Sin embargo, es muy interesante mirar a Jesús como un catalizador, capaz de modificar TODO lo que llegaba hasta ÉL y mejorarlo para con los demás.
- Se paró entre la mujer adúltera y los “tirapiedras” y cambió el odio que la mujer estaba recibiendo de parte de los religiosos por una nueva oportunidad de amor para mejorar su vida. (Juan 8:1-11)
- Se sentó con un maestro de la ley (Nicodemo) y cambió su confusión intelectual en la esperanza de una fé práctica y renovada; invitándolo a nacer -empezar- de nuevo. (Juan 3:1-5)
- Se detuvo a enseñar a los religiosos que lo verdaderamente importante no era un edificio de reunión histórico como habían aprendido, sino más bien qué tanto sus propias vidas se habían convertido en un templo espiritual para Dios. (Juan 2:18-22 / 1ª Cor. 3:16-17)
- Cambió el desprecio y el rechazo que los etiquetados como pecadores recibían, por una mesa de aceptación y respeto compartida con ellos. (Marcos 2:15-17 / Mateo 11:19)
- Tomó tiempo en la cruz para cambiar la saña y la burla de los soldados romanos por el perdón para sus vidas. (Lucas 23:32-38)
Podríamos citar muchos otros ejemplos de cómo Jesús sí cambió el mundo, haciendo mejor todo lo que a su alrededor se producía. Su vida y sus hechos transformaban las peores cosas de su entorno en buenas noticias para TODOS.
Este es nuestro desafío y quizás estas son buenas preguntas para nosotros hoy:
- ¿Qué tanto hemos sido capaces, hasta hoy, de transformar en BUENAS NOTICIAS para otros todo lo que ha llegado a nuestras vidas cotidianas?
- ¿Qué tanto hemos podido mejorar la vida y la experiencia espiritual de las personas que nos rodean, siendo catalizadores de lo que ellos reciben a diario de nosotros?
- ¿Qué tan parecidos a Jesús podremos ser, estando dispuestos aún a sufrir para que otros tengan un encuentro con Dios, y sea eso lo que les cambie la vida para siempre?
Si Dios nos ha puesto en el lugar donde estamos es porque Él nos acompaña y nos da fuerzas para ser los mejores catalizadores del mundo. No nos conformemos con menos que eso, porque podremos lograrlo. Hasta la próxima.
